13 noviembre 2006

FIRMA INVITADA/Javier Jiménez: Don Manuel Díaz-Miguel Moraleda “Gimnástico de corazón”

Sí, digo Gimnástico porque, en la década de los sesenta, en la que era presidente del club, por todos se conocía al equipo de la ciudad como “La Gimnástica”; y digo de corazón porque, él y su junta directiva, mantuvieron viva durante muchos años la llama de la ilusión futbolística de todos los aficionados que subían al campo de “El Peñascal”; y para eso, es menester tener un corazón que soporte los inevitables avatares que genera la dirección de un equipo de fútbol modesto.
Don Manuel no era un presidente al uso; o de los que, por el devenir de los tiempos, se modelan o estilan en la época actual. Era un hombre serio en su pose y sus compromisos; y tal credibilidad, le abría las puertas de todas las instancias a las que acudía para solicitar las ayudas necesarias para el mantenimiento económico del equipo segoviano. Por ello, conseguía cerrar la temporada con resultados económicos muy favorables; como, a modo de dato anecdótico, ocurrió en la de 1961-62, con un superávit de 5.183 pesetas. Pero también fue un hombre que transmitió a su junta directiva su dedicación a la Gimnástica; porque, cada uno de sus miembros, con corazones diferentes, formaron uno solo que latía al unísono para lograr objetivos en pro del equipo de sus amores. Y no les importaba restar tiempo a sus quehaceres cotidianos; o arañar horas de las atribuidas a la familia; o soportar el frío invernal del campo “El Peñascal”; o vaciar sus bolsillos para invitar a almorzar a los limpiadores del terreno de juego.
Y… sí, es verdad que aquellos tiempos se impregnaban de cierto romanticismo; pero, no es menos cierto, que para ello era necesario sentir profundamente los colores de tu equipo: Don Manuel, sencillamente, demostraba día a día su compromiso y amor al Club. La historia de los hombres no se escribe a tenor de los logros personales; sino a través de los sentimientos que sus actos provocan en el resto de los humanos. Pues bien, aquel presidente, era querido por todos los gimnásticos segovianos.
Javier Jiménez Arribas es socio de la Gimnástica Segoviana y su padre, Valentín Jiménez fue miembro de la directiva presidida por D. Manuel Diaz-Miguel Moraleda.

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