Opinión: Envidia

Tengo que reconocerlo, me corroe la envidia. Veo a la afición del Getafe celebrar su pase a la final de la Copa de Rey tras eliminar de forma espectacular al FC Barcelona, y no lo puedo remediar. Y es que he tenido la suerte de ver al Getafe en La Albuera, pero no el año pasado cuando vino el filial a disputar el play-off frente a la Sego, sino en los años ochenta cuando el Geta era un vulgar equipo amateur que militaba en Tercera División y la Gimnástica no era más que un equipo recién ascendido a la categoría nacional.
Pero siento envidia de ver como un proyecto deportivo consigue estar entre los grandes con trabajo y humildad, y donde los éxitos al final terminan llegando. Ojala algún día los gimnásticos podamos disfrutar de tener a nuestro equipo entre los mejores. Ya sé, en este punto entran los pesimistas que dicen este tío está “pirao”.

– ¿Pues si el Getafe lo ha conseguido porque no lo puede conseguir la Sego?
– Ya pero no te das cuenta que la ciudad de Getafe tiene el triple de población que Segovia…
– ¿Y el caso del Villarreal con menos habitantes que Segovia?
– Ya, pero tiene un tejido industrial y turístico que ya lo quisiera nuestra ciudad
– ¿Y que tiene Soria y Almendralejo, con el Numancia y el Extremadura que no tenga Segovia….?

Para empezar creo que lo que tienen es organización, seriedad y unos clubes que con su cuota de fortuna y mucho trabajo han llegado a lo más alto. Han jugado en Primera División con aficiones acostumbradas al barro y las gradas vacías habituales de la Tercera División y Segunda B.

Siento envidia, sí, de que la Sego nunca haya tenido la fortuna no de meter un gol en el momento justo, que también, sino de la suerte más importante de todas, la de tener un equipo de personas competentes al frente de la entidad que consiguieran situar al club lo más alto posible y mantenerlo. Cuando se logró el ascenso a Segunda B, todo el esfuerzo se esfumó y el equipo volvió a la Tercera y con una deuda que casi pone punto y final a la historia de la Gimnástica Segoviana.
Envidia, si del Getafe, que ahora toca el cielo y se convierte en representante de todos los equipos modestos del fútbol español que han crecido en campos de barro y echando horas de viaje en autobús sin ningún tipo de lujo. Y también esperanza de que algún día un grupo de personas con solvencia, seriedad, humildad y profesionalidad tomen las riendas de la entidad y lleven a la Gimnástica Segoviana a lo más alto. Y digo todo esto ahora que la actual directiva espera a convocar elecciones, que muchos no terminan de creer, y otros anuncian campañas para ser presidente del club, y que me temo que no reúne las características anteriormente expuestas. Será cuestión de seguir esperando nuestro momento.

Por cierto mi apoyo para el Sevilla en la final de Copa frente al Getafe, aunque solo sea para contar a los nietos que a la Sego la eliminó de la Copa el campeón del torneo, que si no…..